El primer concierto de Kakkmaddafakka en nuestro país fue todo un éxito. El escenario elegido para tal ocasión fue la madrileña sala Ramdall, primera parada de otras dos que llevarán a estos noruegos a Valencia y Barcelona, y estaba enmarcado dentro del festival Días Nórdicos, que tantos buenos momentos nos está dejando estas semanas y que hoy cierra su edición con el concierto de Lo-fi-fnk en la Galileo.
Kakkmaddafakka tienen dos álbumes en su corta carrera y solo el segundo de ellos, “Hest”, ha sido publicado fuera de las fronteras de su país. En el nuevo número de La Gonzo ya os damos buena cuenta de este disco, lanzado hace unos meses, que contiene una buena dosis de pop fresco y de amplias influencias.
Los noruegos montan el show con siete personas sobre el escenario: guitarra, bajo, teclados, batería y chelo, además de dos coristas, con camisa y pajarita, que nos dejaron coreografías delirantes en alguno de los temas. Lo de las voces es más difícil de concretar, ya que todos ellos, a excepción del batería, cantaron en algún tema. Aunque el peso de las voces recae en Axel Vindenes, frontman que se metió al público –unas 200 personas, algunas de ellas bastante jóvenes- en el bolsillo con divertidos comentarios entre las canciones.
Kakkmaddafakka derrocharon energía, buen rollo y sudor a lo largo del concierto. Tocaron temas de su primer álbum publicado en 2007 “Down To Earth”, tales como “Cool”, intercalados con los hitazos de su álbum “Hest”, entre las que tenemos que destacar “Is she”, “Your Girl” o la enérgica “Restless”.
Para el bis, ¡sorpresa! los coristas cantaron, con más gracia que rigor, una cover cada uno: “Halo” de Beyoncé y “This is how we do it” del cantante de R&B Montell Jordan. Momentazos ambos de un concierto en el que no faltó la diversión y donde la conexión entre público y banda fue total. Cerraron el set con “Drø Sø”, de su álbum “Hest”. Lo dicho, todo un éxito.