Habrá a quien no le guste el fútbol, pero sí los libros. Habrá quien sea fiel a la novela negra más tradicional, la de denuncia social, sin gustarle el fútbol. Quizá haya a quien le guste leer una novela en un fin de semana, de esas cortitas, de menos de doscientas páginas… y no le motive el deporte rey. Para unos/as y otros/as, incluidos los y las amantes del balompié, llega este thriller policíaco.
La centrocampista murió al amanecer (Libros Cúpula) se desarrolla en Madrid, con el estadio Vicente Calderón en plenas obras de desmantelamiento. Allí, un avezado youtuber encuentra un cadáver. El de una jugadora de veintidós años y estrella de un modesto equipo de la primera división de fútbol femenino. La investigación policial la llevarán dos mujeres, la inspectora de homicidios Sol Trocás será la encargada de tratar de resolver el caso junto a la subinspectora Gemma Silom.
Castro-Guerrero ha obtenido el II Premio Carlos Matallanas de Novela Breve con esta obra con un claro mensaje, como en las mejores novelas del género. La denuncia social de la lucha contra el machismo en la sociedad. Y en especial en el deporte, en el fútbol. El título La centrocampista murió al amanecer rinde de algún modo un homenaje a una obra también del género negro, la del barcelonés Manuel Vázquez Montalbán y su «El delantero centro fue asesinado al atardecer». Los beneficios de la venta del libro irán destinados íntegramente a FUNDELA (Fundación Española Investigación Esclerosis Lateral).
Antonio Castro-Guerrero (Málaga, 1971) estudió pintura con José Díaz-Oliva y música en el conservatorio. Terminó la carrera de Magisterio. Ha publicado los relatos Lágrimas en la ducha, pétalos en la corriente (2012), y La perpetuidad de un edén remoto (2013). Su novela El último viaje de Sorolla (2013) resulta galardonada con el Premio Cáceres de Novela 2013. Actualmente trabaja en varios proyectos novelísticos.
La centrocampista murió al amanecer. Antonio Castro-Guerrero. Libros Cúpula
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