Cinematógrafo. Andrés Carranque de Ríos.

cinematógrafoEsta semana, os propongo una divertida y conmovedora novela, Cinematógrafo (Nocturna), de Andrés Carranque de Ríos. Lo primero que hay que decir es que esta obra se publicó originariamente en 1936, unos meses antes de que su autor falleciera. La muerte prematura de Carranque de Ríos, no evitó que atesorase a lo largo de su vida experiencias plasmadas en esta y en obras anteriores.

Así, no solo veremos en Cinematógrafo ciertos tintes autobiográficos. También se aprecian algunos de los temas de la literatura de los años treinta. Desde las luchas proletarias (él fue un marcado anarquista) a las contradicciones sociales, pasando por la afilada crítica a la burguesía española, sin descuidar los nuevos logros científicos y artísticos de la época. En ese fresco del Madrid durante los años veinte y treinta hay espacio tanto para hacerle guiños la migración del campo a las grandes ciudades como a os entresijos sociales de la industria del cine en España. De ahí el título, pues no olvidemos que Carranque de Ríos fue actor e incluso trató de trabajar como actor de doblaje, en París, en las primeras películas de cine sonoro en castellano que se iban a rodar allí.

Las luces y las sombras del mundo del cine se asoman en esta novela vanguardista, dentro de la tradición realista de la época, en el que los puntos de vista entre varios personajes se van alternando. Lo estético y la crítica social se aunan evocando a Dos Passos o Dostoievski, pero también a Galdós o a su admirado Baroja* que le hizo el prólogo a aquella primera edición.

Condenado al silencio, como tantos de sus compañeros de generación, en 1963, Joaquín de Entrambasaguas reeditó Cinematógrafo dentro de una colección titulada Las mejores novelas contemporáneas. Ese dato ha de leerse en perspectiva, ya que De Entrambasaguas ejerció como censor durante el franquismo. Sirva a modo de apunte, un tanto fuera de la novela de Carranque de Ríos, que una comisión depuradora franquista presidida por Joaquín de Entrambasaguas ordenó la destrucción en abril de 1939, en Valencia, de El hombre acecha, de Miguel Hernández, todo y que gracias a dos ejemplares salvados permitieron reeditarlo en 1981.

Volviendo a Cinematógrafo, abundan en ella los diálogos, la picaresca, los dramas personales a través del comportamiento de los personajes, de sus propias palabras. Una obra que merece ser leída si no por lo esperanzador, por ser uno de los primeros testimonios literarios sobre el mundo del cine europeo y por todo lo que nos despertará mientras leamos este Cinematógrafo.

Cinematógrafo. Andrés Carranque de Ríos. Nocturna ediciones.

Andrés Carranque de Ríos (Madrid, 1902) Primogénito de una numerosa familia obrera afincada en el Rastro madrileño, en la calle Mira el Río, tuvo catorce hermanos y cultivó oficios muy variados -vendedor ambulante, marino, actor, albañil, mánager de boxeo, periodista, estibador portuario o modelo de estudiantes en la Escuela Superior de Bellas Artes-, además del de escritor. En 1921 lo encarcelaron por distribuir octavillas anarquistas. Al año siguiente se marchó a París, donde luego trabaría amistad con los surrealistas franceses, en especial René Crevel y Jean Cassou. En 1923 publicó su poemario Nómada con algún poema dedicado a Rosa Luxemburgo y se dedicó a leer versos en los casinos de España. Escribió relatos breves que publicó en periódicos y revistas como: Ahora, La Voz, Heraldo de Madrid, Estampa y Ciudad. Después de participar en películas como Al Hollywood madrileño o Zalacaín el aventurero, conoció a Baroja e hizo trabajos de doblaje. Publicó su primera novela, Uno, en 1934, prologada por su admirado Pío Baroja, seguida de La vida difícil (1935). En 1936, tras publicar Cinematógrafo, falleció en Madrid.

(*) Este año se conmemora el centenario del nacimiento del escritor donostiarra.

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