Sam y Yo. Entrevista a J.E. Alamo

Este 23 de abril se conmemora el Día Internacional del Libro. He querido para esta fecha tan señala y apreciada para mí, compartir en La Gonzo la entrevista que me concedió José Elias Álamo, más conocido por J.E. Álamo. Le conocí en Valencia, ciudad en la que residimos, en la presentación de un libro. Agradecido a él, pero también a la editora, Albahaca Martín, os dejo aquí esta entrevista deseándoos un estupendo día del libro.

P.: ¿Qué podemos adelantar sobre la portada de Sam y Yo, sobre ese Yo sin desvelar en exceso?

R.: Es complicado hablar de esta novela sin desvelar parte de la trama, pero creo que tampoco pasa nada por comentar que Sam es Yo y Yo es Sam, dos en una o en tres. Ahí lo dejo. Sí quiero añadir que la portada es de Sarah Álamo, una artista estupenda.

P.: Creo que hay dos puntos de giro en Sam y Yo, más bien, en la vida de la protagonista que lanzan el argumento de la novela. Uno es el día que ella decide tomar una decisión drástica en la casa donde vive, con 17 años. La segunda, por casualidad, cuando otro personaje se cruza con ella en un edificio; una simple mirada y la tranquilidad se verá alterada. Me sirve para preguntarle por el background de Eva, por la importancia de la rotura de las zonas de confort.

R.: Eva carece de una zona de confort real, es todo postizo. Su vida se balancea constantemente sobre el abismo, tanto es así que se ve obligada a recurrir a Sophie primero, y luego a Sam para enfrentarse a los desafíos a los que se ve sometida. Sam es quien rompe con esa zona de falso confort o conformismo. Si hay que definir la zona de confort tanto de Sam como de Sophie, esta sería la adaptación constante a lo que se les viene encima, aunque sí que es cierto que más adelante alcanzan una situación en la que se acomodan, aunque les dura lo que les dura.

P.: Sigo con los guiños, con el cine. En esta ocasión, para preguntarle por Bogart y la “Flaca”, pareja en la ficción y en la vida real, como leemos en un pasaje de la novela. Imagino que no es casual que aparezca Casablanca en Sam y Yo; quizá hay siempre algo del autor en cada una de sus criaturas narrativas. ¿Qué ha dejado ud. en esta?

R.: Me encanta el cine de todas las épocas, la actual también, pero siento una especial debilidad por el clásico de Hollywood de los 40, 50 y 60. En especial las obras protagonizadas por Audrey Hepburn, Humphrey Bogart, Gregory Peck, Paul Newman, Elizabeth Taylor, etc. El guiño a estas películas y actores es algo que aparece en varias de mis novelas y es mi modesta forma de hacerles un homenaje. Casablanca con Bogart y Bergman, tiene tantas frases memorables que se podría hacer una novela con ellas.

P.: La narración transita entre varias voces, unas en primera persona, otras aportan información acerca de otros personajes, me refiero a cierto diario que encontramos en la novela. Háblenos de la elección de ese contrapunto narrativo a la hora de plantear la trama de Sam y Yo.

R.: Suelo escribir por impulsos, soy uno de esos autores que emplean más la brújula que el mapa a la hora de plantear mis historias. Me resultó natural elegir esa forma de narrar la historia dando voz a algunos personajes en primera persona, a otros en tercera e incluso, introducir a unos pocos a partir de lo escrito por uno de los personajes en ese diario que mencionas; pienso que esta estructura involucra al lector de manera más eficiente.

P.: Por último, no me resisto a preguntarle por un término que aparece salpicando la novela: el de loco o loca. En una sociedad que quiere ser inclusiva y socialmente responsable, los nombres, los adjetivos, cómo se llamen a ciertas patologías parece una asignatura pendiente para evitar la estigmatización. En general, pero sobre todo, con los más jóvenes, como hemos podido comprobar con casos recientes en los medios de comunicación. Si quiere comentárnoslo, en el marco de Sam y Yo, adelante.

R.: Al igual que antes, insisto en que no pretendo moralizar ni dar lecciones, tampoco hablar de lo políticamente correcto, porque ocuparía demasiado espacio, pero sí incluiré algo que escribí en una ocasión cuando era bastante más joven: “En ocasiones, el loco es aquel que piensa de forma distinta a la mayoría”. No olvidemos que la gente mezquina suele estigmatizar a aquellos que son diferentes.

José Elias Álamo nació el año 1960 en Leamington Spa (Reino Unido) y vive en Valencia. Comenzó a escribir a lo cuarenta y seis años. Autor especializado en fantasía, género negro y terror, le gusta mezclar géneros en sus obras y se inclina por subgéneros como la fantasía urbana. Es autor de varias novelas, numerosos relatos y coordinador de antologías en las que colaboraron distintos autores. Ha obtenido varios galardones por su obra. Entre otros con El Tormo Negro (2012) y dos premios Pandemia (2012 y 2013) por su saga de novelas de Tom Z Stone, obras pertenecientes al género negro.

Sam y Yo. J.E. Álamo. Vencejo ediciones.

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