A tumba abierta. Joe Hill

Gracias a A tumba abierta (Nocturna), de Joe Hill, he podido acercarme al universo narrativo de este autor. Sí que había leído algunas obras de su padre, Stephen King, relatos sobre todo. Quizá por ello me pensé poco adentrarme en estos magníficos 13 relatos.

Trece sí, abstenerse supersticiosos. Aunque es cierto que de los trece recogidos en A tumba abierta dos son coescritos con su padre. Es más, hay una interesante introducción titulada ¿Quién es tu padre? Respecto a los relatos, no voy a caer en la trampa de desvelar o diseccionar cada uno de ellos. Diré que Joe Hill ha heredado el talento por lo fantasmagórico y lo terrorífico. Huelga decir de quién.

Hay relatos más clásicos, apelando a lo más atávico de la condición humana; en cambio otros refulgen tanto por su argumento como por su formalismo narrativo. Un ejemplo es Tuiteando desde el Circo de los Muertos, que se lee tal cual alude el título, a golpe de tuits. La frontera entre lo real y lo irreal es tan sutil en estos relatos de A tumba abierta que consiguen atraparnos desde las primeras páginas. Quizá por algo que ya comenté, por la habilidad de Hill de narrar acerca de horrores cotidianos, de enfrentarnos a conflictos personales a través de personajes unas veces adultos, otros adolescentes (como el relato ya mencionado o el titulado Rosas) o niños, como en Junto a las aguas plateadas del lago Champlain.

A quien no haya leído a Hill y le apasionen las historias de terror que no lo dude, que se deje infectar por A tumba abierta. Incluso si se es más atrevido/a se puede ir al final del libro y leer el apartado Apuntes y agradecimientos. En este Hill comenta intimidades de cada relato, lo cual da un plus a la obra, a mi parecer. No quiero olvidar mencionar que los dos relatos que flanquean esta antología, el primero y el último, los escritos a cuatro manos con su padre, son dos joyas fuera del propio libro. En la hierba alta dio origen a la película inaugural del Festival de Sitges 2019 -dirigida por Vincenzo Natali– y estrenada ese año por Netflix. Por su parte, la plataforma HBO prepara ya la adaptación de Acelera, que además de dar imagen a la portada de A tumba abierta, fue escrita como homenaje al escritor Richard Matheson, a su famoso relato Duelo (que sirvió de inspiración a Spilberg para su El diablo sobre ruedas). Nada más y nada menos. Ahora toca buscar un sitio cómodo y subirse a este “monstruo” llamado A tumba abierta.

Joe Hill es autor de novelas superventas y premiadas como Cuernos (2010), NOS4A2: Nosferatu (2013; Nocturna, 2020) —adaptada a la televisión por AMC— y Fuego (2016; Nocturna, 2017) —próximamente llevada al cine por la 20th Century Fox—. Además, ha cultivado el género del relato con Fantasmas (2005) y el de la novela corta con Tiempo extraño (2017; Nocturna, 2018) y el del cómic con Locke & Key (2009-2013).

A tumba abierta. Joe Hill. Nocturna ediciones. Traducción: Pilar Ramírez Tello y Manuel de los Reyes