Francesco y Linda son una pareja feliz. Cada año celebran su aniversario invitando a un grupo de personas desconocidas a una fiesta cargada de poesía y misterio, de música y baile. Esta pareja de enamorados desea compartir con los invitados a ‘El Secreto’ una receta, y un momento mágico, cargado de magnetismo y complicidad. Olorosos y jugosos tomates caen en la sartén y se juntan con los huevos recién batidos. Después de probarlos, acompañados por un trago de vino, todo puede pasar. Si hay suerte, los iniciados hallarán, en esta fiesta dionisíaca con música en directo, un amor tan especial como el que se tienen la pareja de protagonistas.

Esta vez Afrodita nos sirve de pretexto dramático para enfrentar a los espectadores con la sensualidad, la fertilidad y la parte erótica que poseen. Los invitados llegan a iniciarse así en un secreto que consiste en abrir sus sentidos al disfrute de las cosas y seres que nos rodean, por el goce de la vida.

El Teatro en el Aire invita a desplazarnos por un mundo sensual, íntimo y estremecedor. “Escucharse o intuirse es una acción que pasa forzosamente por el cuerpo. Porque el cuerpo no olvida nunca, sobre todo si le dejamos recordar. De ahí la importancia de lo sensorial”, explica Lidia Rodríguez, directora y autora de esta obra.

Se trata de un montaje en el que la proximidad del actor con el espectador logra momentos de intimidad de enorme intensidad en los que las reacciones del visitante van a determinar, en buena medida, lo que finalmente suceda. Todo surge como resultado de meses de investigación, en los que se ha experimentado con diversas fórmulas dramáticas hasta dar con la que se adecue en mayor medida a la búsqueda de un grupo de personas que se enfrentan por primera vez con esta ceremonia de exaltación de la vida. El público, que termina convirtiéndose en un personaje más, va a recuperar una forma de mirar de la que en muchos casos ya no recordaba.

El secreto