mendicuttiEduardo Mendicutti (Sanlúcar de Barrameda, 1948) periodista y escritor, es autor de más de una docena de obras, entre las novelas publicadas destacan ‘El palomo cojo’ (adaptada al cine por Jaime de Armiñán), ‘Los novios búlgaros’ (adaptada al cine por Eloy de la Iglesia), junto a ‘Yo no tengo la culpa de haber nacido tan sexy’, ‘El beso del cosaco’, ‘El ángel descuidado’, ‘California’, ‘Ganas de hablar’, ‘Mae West y yo’ y ‘Otra vida para vivirla contigo’. Ha recibido entre otros el Premio Sésamo 1973 por ‘Tatuaje’; el Café Gijón 1974 por ‘Cenizas’; el Premio de novela corta Ciudad de Barbastro 1982 por ‘Una mala noche la tiene cualquiera’; el Premio Cáceres de novela corta 1984 por ‘Última conversación’; fue Finalista del premio La Sonrisa Vertical 1987 con ‘Siete contra Georgia’; fue asimismo Finalista del Premio Nacional de Narrativa 1992 con ‘El palomo cojo’, y Premio Andalucía de la Crítica 2002 por ‘El ángel descuidado’. ‘Su último libro es ‘Furias divinas’ (Tusquets, 2016)

 

 ‘Furias divinas’ es una novela breve pero incisiva, aunque han pasado más de 30 años para que se haya decidido a que vea la luz.

Sí, a veces me han preguntado por los estímulos para escribirla; uno es la situación política, y yo he escrito muchas novelas sobre acontecimientos y me acordé obviamente del intento de golpe de estado de Tejero que fue un acontecimiento importante en la historia de este país, y después me acordé de lo otro, de cómo la novela estaba contada con una voz muy especial que era la de un travesti, es decir, la de alguien que en principio no tiene prestigio digamos ni social ni literario para contar la historia, para contar lo que nos pasa, ni siquiera le puede importar lo que le pase individualmente y por tanto carece de prestigio para contar lo que nos pasa con el tiempo pero a mí me pareció muy interesante aportar este tipo de voces desde la orilla desde los márgenes de la narración de lo que somos y de lo que nos pasa.

Eso de ser o tener más o menos prestigio para hablar me ha recordado a cuando uno se sube a un taxi y te encuentras a un taxista que podía desde arreglar el gobierno a ser el entrenador perfecto de la selección española por lo que sabe de fútbol.

Pues mira, yo me encontré que aquí en España todo el mundo hablaba de política, todo el mundo, todo el mundo sabe de política y de economía, y vas en un autobús y oyes a la gente hablar, y estás en una gasolinera o ibas a una cafetería y oyes a la gente hablar en un paso de peatones oyes a la gente hablar y cada uno de ellos aportaba de manera distinta manera, no hablaba lo mismo un analista político que un ama de casa que está en la calle hablando con su vecina de lo mal que está todo. Y cada uno de ellos aporta una experiencia diferente y sentida y vivida de una manera distinta y contada con su lenguaje de una manera distinta.

Puestos a evocar cosas con su novela esta especie de paréntesis suyo me ha evocado al famoso cuadro de la familia real que ha tardado 20 años en terminarse, un periodo de tiempo en el que parece uno a su vez evocar aquello de cómo hemos cambiado en todos esos años, ¿no?

Es verdad, al final ‘Furias divinas’ es un intento de retrato de la situación política, social, familiar que estamos viviendo en nuestro país en este momento. ¿Hemos cambiado? Sin lugar a dudas. Este país en 30 años ha cambiado muchísimo en unas cosas para bien, sin lugar a dudas, ¿para mal? Bueno. Sobre todo hemos llegado a un punto en el que sin duda es necesario un poco de saneamiento, sanear… Es necesario sanear el momento político y social, por tanto, el retrato que hacen estos seis personajes estos seis transformistas a través de sus propias experiencias individuales de la situación colectiva es diferente, es muy distinta del que diría La Madelón, ‘una mala noche la puede tener cualquiera’, y de la situación política de ese momento es diferente sin lugar a dudas pero ahí estaba lo interesante, que desde los mismos márgenes o las voces de personas menos prestigiosas relatar y retratar cómo somos y cómo hemos cambiado y cómo tenemos que cambiar.

Ginés J. VeraEntrevistaLiteraturaEduardo Mendicutti,Furias divinas,Novela
Eduardo Mendicutti (Sanlúcar de Barrameda, 1948) periodista y escritor, es autor de más de una docena de obras, entre las novelas publicadas destacan ‘El palomo cojo’ (adaptada al cine por Jaime de Armiñán), ‘Los novios búlgaros’ (adaptada al cine por Eloy de la Iglesia), junto a ‘Yo no tengo...