La escritora sueca Mari Jungstedt, afincada en Estocolmo, pero que pasa temporadas en nuestro país, firma la duodécima entrega de la célebre serie de Gotland.

En “Las trampas del afecto” (Maeva), el inspector de policía Anders Knutas aparece en la habitación de un hospital, apenas recuerda por qué está allí. Por otro lado, se nos va desvelando las especiales circunstancias de una controvertida herencia al fallecer el señor Ramberg. Sus tres hijos, Julia, Maria y Daniel heredan la propiedad de una granja construida en el siglo XVII que forma parte del patrimonio histórico de Gotland.

Los problemas surgen a raíz de que Julia no está dispuesta a vender. Lleva años en la granja, le gusta su vida allí y echa de menos a su hermano pequeño convencida de que con él las cosas serían distintas. Por su parte, Maria y Daniel si están dispuestos a deshacerse de la propiedad. Maria desea salir de un matrimonio infeliz con un marido alcohólico, en tanto Daniel tiene una gran deuda de juego que debe saldar cuanto antes. Para ello, los dos hermanos contratan los servicios de la agencia inmobiliaria donde trabaja Sanna Widding.

En un juego de historias narradas en contrapunto iremos desentrañando los miedos y motivaciones de estos y otros personajes protagonistas de “Las trampas del afecto”. Por una parte, Anders Knutas y su actual relación con su colega Karin Jacobsson. Por otro, las relaciones entre los hermanos Ramberg, y, por otra, la cadena acontecimientos inesperados en la isla de Gotland, en especial cuando aparece el cuerpo sin vida de Sanna Widding en un pantano cercano a la granja. Porque una de las historias convergentes al sorprendente final irá desvelándonos la naturaleza de un misterioso personaje clave en toda la trama. No en vano, varios intentos de asesinato pondrán en peligro a otros habitantes de la isla, bajo una premisa en común: su deseo de vender la prestigiosa granja de Gotland.

Mari Jungstedt (Estocolmo, 1962) se define a sí misma como “una española en el envase de una sueca”. Su célebre serie de Gotland, iniciada en 2003 y publicada con gran éxito de ventas y público en numerosos países ha vendido más de cuatro millones de ejemplares solo en Suecia. Aunque actualmente vive en Estocolmo, su gran pasión por el estilo de vida mediterráneo le hace pasar temporadas en nuestro país, en las islas Canarias, en especial. Compagina su trabajo de escritora con el de embajadora de la ONG SOS Children Villages.

Las trampas del afecto. Mari Jungstedt. Maeva editorial.

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La escritora sueca Mari Jungstedt, afincada en Estocolmo, pero que pasa temporadas en nuestro país, firma la duodécima entrega de la célebre serie de Gotland. En “Las trampas del afecto” (Maeva), el inspector de policía Anders Knutas aparece en la habitación de un hospital, apenas recuerda por qué está allí....